El Cartel de Semana Santa de este año, a mi opinión de observador, un trabajo digno de mérito de su autor, el cordobés de Fernán Núñez, José María Ariza Castillo. Bebió de las fuentes de la Escuela de Artes Gráficas ‘Mateo Inurria’ y más tarde en la Escuela del recordado político ‘Dionisio Ortiz’ en la modalidad de Orfebrería, Joyería y Platería, ambas de la capital cordobesa. Un apasionado de la Semana Santa perteneciendo a varias cofradías de Córdoba y Sevilla.
De su cartel Semana Santa de Benalmádena 2022, de líneas clásicas, pero cargado de simbología y referencias al pueblo de Benalmádena. Una obra hecha sobre una lámina tratada con técnica al café, para envejecer la base donde el autor ha realizado su obra, íntegramente a bolígrafo, usando diferentes tonos y pan de oro. Lleva como fondo un plano naval donde en el horizonte está el mar con las carabelas cristianas de Colon, inspirados en el Castillo de Colomares de Benalmádena. Al otro punto cardinal está la Parroquia de Santo Domingo, sede canónica de la Hermandad. En el Cenit arranca las geométricas conformando unos puntos cardinales, donde la cara de lágrimas sollozas de la Virgen de la Esperanza ocupa el primer plano, con su velo y rostrillo de encajes, coronada por el sol y oro radiante de resplandores.
Una obra hecha sobre una lámina tratada con técnica al café, para envejecer la base, donde el autor ha realizado su obra, íntegramente a bolígrafo
En las coordenadas del plano de navegación no puede faltar la Stella Maris (Estrella del Mar) que es el símbolo de la Esperanza. Un mensaje similar se refleja en otro título de María, que aparece en la lista oficial de Letanías de Nuestra Señora: Estrella de la Mañana. Ambos títulos se refieren a María como un símbolo de Esperanza y como una prefiguración de la inminente venida de Jesús. Una combinación de los dos temas produce Estrella del Mar. Al otro extremo de líneas vemos Spes Nostra, “Dice la Esperanza un día la verás, si bien esperas”. Dice la desesperanza: “solo tu amargura es ella”.
Más abajo en otro lugar podemos observar el “Fons Signatus” que significa Puerta del Cielo o Porta Coeli del latín eclesiástico. También se acostumbra a pronunciarse “Porta Cheli”. La Virgen de la Esperanza es nuestra Esperanza de la Resurrección. Lleva un broche con una esmeralda. El verde genera sentimiento de paz y tranquilidad. Desciende un rosario de perlas cultivadas y un ancla que nos recuerda las aguas profundas de los mares de Benalmádena. El autor habla con sus pinceles, en sus retoques marinos.
En el Nadir, nos encontramos a la muerte, una muerte sola rodeada de maleza. En cambio, el autor ha laureado con bellos trazos, las flores, hojas y margaritas, los años de nuestra era, en números romanos, época que nos retrotrae a la efusión y muerte en la Cruz, que escolta con dos notables animales mitológicos de estilo grutesco, que se denominaban “Quimeras”. Una especie de dragón híbrido.